En un viaje de estudios para vivir por un año fuera del País y con una pequeña exploradora de año y medio, despertamos como Padres primerizos a un mundo de juegos, libros y aprendizaje, nuevo para nosotros.

Visitamos museos, centros de arte, bibliotecas, parques y centros de juego, en un recorrido para entretener a nuestra pequeña, al final siempre los más asombrados éramos nosotros al conocer nuevo material, actividades, libros y formas de enseñar diferentes para la primera infancia.

Cuando nos tocó regresar a casa en nuestra querida Bolivia, exploramos la idea de traer un poquito de lo vivido que nos había enriquecido en gran manera en la crianza de Zoe y en nuestra experiencia como padres.

Así nos lanzamos a la aventura de contagiar el amor por “Ser pequeños” y por los libros, los que nos habían ayudado muchísimo en el desarrollo del lenguaje bilingüe en nuestra niña y ha conectarnos con ella y entre nosotros de una forma genuina.

El primer material que descubrimos provenía de la editorial inglesa Usborne.

Con mucha ilusión logramos traer estos maravillosos libros a Bolivia.

Entusiasmados porque muchos otros niños experimenten la lectura sensorial, creamos actividades especialmente diseñadas para fomentar el amor por la lectura y el aprendizaje bilingüe.